La noche era nocturna, la calle húmeda, muy iluminada y llena de adolescentes, jóvenes, adultos, adultos con niños en los hombros y personas de la tercera edad. Sí, alcancé a ver dos o tres cabezas blancas dentro del Pepsi Center. El alcance de Inspector es único.
La fiesta empezó con Los Victorios, aunque antes tocaron Skapital Sound y Sekta Core, pero sin emocionar mucho a la banda. “El Vino”, “El Peor Momento”, “Psicótico”, “No te Olvidé”, “La Caída y la Gloria”, “Yo Estoy Bien”, “Nasty Uncle Hippie”, “Sol de Medianoche” y “Si Tu Boquita Fuera” dejaron las tarimas calientes y preparadas para el cotorreo que Inspector ya saboreaba.












La banda regiomontana atascó su presentación de canciones clásicas. La selección de temas fue casi perfecta pues algunas faltaron, pero es comprensible porque parece imposible que algún día salgan a tocar todo, de verdad todo su repertorio.
“Es por ti”, dedicada a cada uno de sus fieles presentes arrancó la noche y “Deja ya de mentir” seguida de “Breve historia de amor y una mujer” completaron el trío de apertura. Tres épocas distintas de la banda desde el inicio y las que faltaban.
“El relato” y “Sin rencor” del disco Alma En Fuego desfilaron por la alfombra roja del vigésimo aniversario. ”Isla Jamaica”, “El dejado” y “Ruby soho” –cover de Rancid, banda que influenció el sonido de Inspector- también hicieron acto de presencia.
“Grito de unión”, “Te he prometido” y “No piensa en ti” dieron paso a la parte romanticona. Todas las parejas se prepararon, se abrazaron, se vieron a los ojos, se besaron con mucho amor, etcétera. Ellos cantaron primero con “Inspiracional”, ellas regresaron tanto cariño con “Como un sol”. La miel se desbordaba por el Pepsi Center y a mí me dio diabetes. Mucha.


Por fortuna volvimos al rencor con “Las tijeras” y “Cara de chango”, aunque no me duró mucho el gusto porque siguieron más canciones dulces, es decir: “Me estoy enamorando” y “Osito dormilón”. “Y qué” seguida de “Araña Ska” dictaron el final de una enérgica primera parte que dejo a todos con hambre de más, aunque muchos sabíamos que cuando volvieran se terminaría el festejo.
“Busco amor”, primer sencillo de su nuevo material siguió la fiesta y tendió los manteles largos para que Rocko Pachucote pisara el escenario y tocara el himno de himnos: “Amnesia”. Luego Aldo y “Pato”, también de Maldita Vecindad y los Hijos del 5to Patio, arribaron para palomear “Supermercado” del álbum debut de ‘los malditos’.
La entrada de los mariachis me hizo pensar que el final sería épico. No podía ser diferente, sólo una canción puede cerrar la noche y todos nos miramos con cierta conspiración en las pupilas. Nadie quería arruinarlo, esperamos pacientes hasta que los acordes de “Amargo Adiós” emanaron de las bocinas. Nos volvimos locos. Cierre perfecto.