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Pólvora Live

Roger Waters ofreció el mejor concierto del año en el Palacio de los Deportes

Finalmente, Roger Waters regresó a la Ciudad de México para presentar su This Is Not A Drill Tour. Aquí te contamos que tal estuvo.

Mario Valencia

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Roger Waters en el Palacio de los Deportes

En mi pesar adolescente siempre estuvo no asistir al show especial de The Dark Side of the Moon que ofreció Roger Waters en el Foro Sol hace más de 10 años. Ni se diga de mi inasistencia hasta cuando estuvo gratis en el Zócalo donde el muro de ladrillos blanco, se cubrió con la bella frase de “Fuera Peña”. Parecía que no estaba en mi destino ver al cofundador de Pink Floyd, algo que me aterraba dado que el hombre, ya tiene casi 80 años y la vida puede dar muchas vueltas.

La vida finalmente me dio la oportunidad de escribir una letanía sobre lo que fue su primer show de la gira This Is Not a Drill en el Palacio de los Deportes. Aquellos años de espera valieron la pena, pues la experiencia, francamente, es inefable. Tendrían que vivirla por su cuenta, correr por un boleto para el show de esta noche y experimentarlo. Pero… Lo intentaré.

Parte I: Deben creer que somos estúpidos

Las luces apagaron. Una distopía urbana comenzó a proyectarse en la pantalla en forma de cruz del escenario 360. De fondo, comenzaba a asomarse la melodía de “Comfortably Numb”. Todos la coreamos sin excepción. El cerdo en la pantalla volaba por debajo de la luna cuando repentinamente, la cruz se elevó y la banda entró a escena. Los sonidos de un helicóptero eran acompañados por un hostigante reflector que señalaba culpables entre la audiencia. “Deben creer que somos estúpidos”, se leía en la pantalla. La proclama para despertar el letargo había sido impuesta y Roger Waters, sin más, entró a escena. “Another Brick In the Wall”. ¿Qué más podía pedirse?

Los visuales impresionan pero no se limitan a ser una mera atracción. Transmiten un poderoso discurso, imágenes conmovedoras, otras para reflexionar sobre la violencia y hasta anécdotas del propio Waters.

Roger Waters en el Palacio de los Deportes
Una luz por cada ser querido perdido, por cada territorio perdido ante el intervencionismo. Miles de luces para guiarnos hacia el futuro. Foto: Mario Valencia/Pólvora.

El hombre se da su momento para rendir tributo a aquellas personas fallecidas por la brutalidad policiaca, como George Floyd o Victoria Salazar Arriaza, la mujer salvadoreña asesinada en Tulum por obra de la justicia. Cuando Reagan mostró su jeta enorme junto con el resto de los presidentes estadounidenses en “The Bravery of Being Out of Range”, fueron recibidos con un justo abucheo, en especial Trump.

Tras una prolongada exhibición de virtuosismo, Roger Waters tomó el micrófono para decir unas cuantas palabras en español. “Quiero agradecer a todos los que compraron boletos desde el 2020 y que están aquí. Significa mucho para mi. ¡Qué viva México!”. Enternecedor momento previo más emotivo de la velada: un bloque totalmente dedicado a la memoria de Pink Floyd.

Con “Have a Cigar” comenzó una retrospectiva de sus primeros años en el viejo terruño junto al Diamante Loco. “Es tan fácil perderse, ¿no?”, reflexiona sobre su fallecido amigo a quien dedicó, con enorme cariño, “Wish You Were Here”, antes de adentrarnos al psicodélico viaje hacia la mente de Syd Barrett en “Shine On You Crazy Diamond” (en versión abreviada, por aquello del tiempo).

Finalmente, en un arranque un tanto ególatra para compararse con Aldous Huxley y George Orwell, el bajista recordó el álbum Animals con “Sheep”, mientras una oveja gigante inflable recorrió en círculo el Palacio.

Hora del intermedio.

Parte II: Los malditos cerdos nos matarán a todos

A los 15 minutos, volteamos hacia el techo donde el famoso cerdo, comenzó su recorrido mientras las pantallas comenzaban a enjaularnos. “Fuck the Poor” se leía al costado del bélico chancho. “Este debe ser un mitin fascista”, se escuchó mientras caían pendones con el famoso símbolo de los martillos cruzados y Waters, daba paso con su disfraz de dictador. Recorrió cada rincón hasta llegar a una de las esquinas donde le aguardaban dos soldados que le darían una metralleta para acribillarnos a todos en un grandioso juego de iluminación para cerrar “In the Flesh”.

Con “Run Like Hell”, la proyección compartió el crudo video de un par de reporteros y civiles siendo asesinados sin razón alguna por el ejército estadounidense. Al final, compartió que la persona encargada de difundir dicho video con el mundo, fue el periodista Julian Assange, de quien exigió nuevamente su libertad.

Roger Waters en el Palacio de los Deportes
Previo a la segunda parte del show, de la nada el cerdo comenzó a flotar sobre todos los asistentes mientras se anticipaba “In the Flesh”. Foto: Mario Valencia/Pólvora.

Tras los cerdos bailarines capitalistas de “Money”, lasers de luces blancas apuntaron hacia abajo para formar un triángulo luminoso; era momento del anhelado bloque de The Dark Side of The Moon. Una tras otra, “Us and Them” (donde un par de amigos frente a mi se abrazaron al borde del llanto), “Any Colour You Like”, “Brain Damage” y “Eclipse”, fueron dibujando el efecto arcoíris en la pantalla. Épico.

A pesar de las dos horas y media de concierto y que aún faltaban clásicos por escucharse, la vida ya no da para más y Roger preparó su cierre con la joya balada, “Two Suns in the Sunset”, de la cual admitió haberse “robado” algunas ideas de Dylan.

Mientras terminaba, sus compañeros abandonaron sus lugares para adaptarse como la banda de un desfile. Sus coristas seguían con la melodía del último tema mientras el tecladista, acompañaba con una jocosa melódica. Waters siguió detrás de ellos y aunque dijo que “tocarían una más”, las luces se encendieron y no volverían a salir.

@polvorarock 🤯 Lo de anoche en el concierto de Roger Waters fue indescriptible, con un gran mensaje para avivar nuestro espíritu combativo. Si el discurso del bajista al menos logró llegarle a al menos una persona, habrá sido misión cumplida. Por supuesto los hits no faltaron y así sonó "Money". ¿Fuiste? . . . . . #rogerwaters #pinkfloyd #progressiverock #polvoralive #punkband #punkmusic #alternativemusic #classicrock #metalband #metalmusic #heavymetal #hardrock #metalhead #indierock #indiemusic #musiclovers #conciertosmexico #nikon #nikonmx #músicaenvivo #festivalesmexico #rocknacional #rockmexicano ♬ sonido original – Pólvora

Si al menos una persona asimiló el mensaje, entendió las intenciones de esparcir hermandad del artista y como yo, le dejó una marca este espectáculo, entonces Roger Waters logró su cometido. Es imposible derrocar un sistema pero no la conciencia del colectivo. Hay que empezar a desarrollar el sentido crítico de nuevo pues como sus visuales lo demostraron, vivimos en una época tan enajenante que los problemas sociales terminan siendo triviales. Este concierto fue la prueba del arte como vehículo para influir en las masas para un bien mayor. Ojalá funcione.

Setlist de Roger Waters en el Palacio de los Deportes

  1. “Comfortably Numb”.
  2. “The Happiest Days of Our Lives”.
  3. “Another Brick in the Wall Pt. 2 & Pt. 3”.
  4. “The Powers That Be”.
  5. “The Bravery of Being Out of Range”.
  6. “The Bar”.
  7. “Have a Cigar”.
  8. “Wish You Were Here”.
  9. “Shine On You Crazy Diamond (Pt. VI-VII, V)”.
  10. “Sheep”.
  11. “In The Flesh”.
  12. “Run Like Hell”.
  13. “Déja Vú”.
  14. “Is This The Life We Really Want?”.
  15. “Money”.
  16. “Us and Them”.
  17. “Any Colour You Like”.
  18. “Brain Damage”.
  19. “Eclipse”.
  20. “Two Suns in the Sunset”.
Roger Waters en el Palacio de los Deportes
El legado de Barrett siempre vivirá en los recuerdos de su viejo amigo. Foto: Mario Valencia/Pólvora.

Fotógrafo y reportero desde 2015, programador del Festival Macabro, profesor de Historia del cine en la FES Acatlán y coordinador de materiales en Filmin Latino.

4 Comentarios

1 Comentario

  1. Avatar

    i_alcocer

    16 octubre, 2022 en 2:06 pm

    No chavo, el virtuosismo de Pink Floyd se perdió hace mucho, esa versión “corta” de Shine on crazy diamond no es “por tiempo”, es porque más de la mitad del mérito de esa canción -y de muchas más- le corresponde a la guitarra de Gilmour, quién ya no está ni le interesa estar en la banda, precisamente por el protagonismo de Waters y a su -ya probada como fallida- sentencia egolatra de que sin él, la banda no tenía bada que hacer (de hecho pasó lo contrario).

    Entiendo que quieras quitarte la espinita de no quedarte sin escuchar la música en vivo de una banda que fue icónica en la época de la psicodelia y el rock progresivo, pero no vengas a decirnos que siguen siendo la daga, por que todos los que los escuchamos y conocinos en sus buenos tiempos sabemos que ya van de salida, y que si continúan vendiendo entradas es nada más por su acto de circo con globos con que han sabido fascinar a la gente una y otra vez (ahora disfrazado de activismo social)…

    Que bueno que fui a ver a Pink Floyd en 1994, cuando era todavía una banda propositiva y de vanguardia, y no un viejito que ya casi no puede hablar y sigue reciclando los mismos éxitos e ideas de hace 40 años, sin poder crear en todo ese tiempo ni un solo disco, sonido o propuesta artísitica nueva, y con un discurso “anti-capitalismo” que ha sabido monetizar a mas no poder…

    hubieras ido a Rammstein mejor 👍🏼
    (y escrito sobre ellos, eso sí dió más de qué hablar)

  2. Avatar

    Francisco Alcaraz

    17 octubre, 2022 en 5:08 pm

    No estoy de acuerdo, RW si bien peca de idolatría es también fiel a sus convicciones antisistemicas (muestra de ello su obra maestra de más de 30 años The Wall). Sus convicciones políticas pro palestino son marcadas también en su último disco por cierto buenísimo date oportunidad de escucharlo. Y desde que se separo de Pink Floyd es el que mejor música compuso como solista. No demérito a David Gilmour ni a Masón ni a Write que hicieron el cuarteto perfecto para formar parte de Pink Floyd. Por cierto, también Mason esta de gira con un setlist de verdad envidiable.

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    César

    18 octubre, 2022 en 8:53 am

    Espectáculo de globos, ya va de salida, etc etc. Muchos de los que asistimos no vamos porque sea un espectáculo de circo con globos y quien piense y generalice así es un completo idiota, muchos de los que vamos lo hacemos por el simple hecho de ver tal vez por último vez a una de las leyendas de la historia del rock, eso hasta mi hijo de 7 años lo comprende, cada uno de nosotros como personas y como individuos tenemos una forma de pensar, de ser y de actuar y no todos los artistas le van a dar gusto a cada uno de nosotros simplemente es Roger Waters uno de los precursores de una de las más grandes bandas de rock, es tan complicado entender que lo vamos a ver simplemente por el hecho de ser Roger Waters???

    Por cierto en 1994 vino lo que quedaba de Pink Floyd, cuando vamos a criticar hay que hacerlo bien y no a lo p3nde j o

  4. Avatar

    Jorge

    18 octubre, 2022 en 10:50 am

    No sé de dónde sacas que Roger Waters se comparó con George Orwell y Aldous Huxley. Lo que dijo realmente en el concierto al presentar Sheep fue que el álbum Animals era un homenaje a la obra de estos grandes escritores. Y homenajear a alguien no significa que se compare con ellos.

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