Polyphia en la Carpa Velódromo: una excelente clase de virtuosismo

Tarde de sábado veraniego, el mejor momento de la semana para disfrutar un show lleno de tanta anticipación. Desconozco en que punto de la vida, Polyphia cobró tanta popularidad en nuestro país pero verlos pasar del Alicia a reventar la Carpa Velódromo, es muestra de su crecimiento. No es para menos: el cuarteto es una máquina de virtuosismo que, a diferencia de otros que tocan figuras y acordes imposibles, ellos lo hacen envueltos en un innegable carisma.

La fila daba la vuelta en lo que parecía ya una vorágine de gente, entre fans y despistados que buscaban subirse al Metrobús. Acompañados por las latas de Red Cola terminadas a un solo trago (gran patrocinio, se reconoce), entramos a la Carpa y con mucha sorpresa, varios terminamos maravillados por las actuaciones vistas. Y eso que con mi gran altura, no se alcanza a ver mucho del escenario, ¡ya háganle un maldito nivel esa tarima!

Afterglow, el debut de una prometedora banda nacional

Cierto es que, las puertas abrieron mucho antes del concierto y eso desesperó a varios en las primeras filas que ya gritaban “culero, culero” cada vez que se paseaba algún roadie en el escenario. Ah, las viejas costumbres que nunca mueren, siempre es jocoso vivirlas.

Previo al show estelar, subió al escenario Afterglow, agrupación capitalina que debutó a lo grande la noche del 13 de julio. Lo de ellos es una mezcla interesante de ritmos progresivos y melodías metalcore, híbrido que vemos cada vez más de moda gracias a actos como Jinjer o Between the Buried and Me.

Excelente presentación donde la estrella, sin duda fue su bestial bajista. ¡Qué crack y qué energía en el escenario! Por otra parte, aunque el vocalista se notó nervioso en varias partes, se soltó más cuando dedicó una de las canciones a su novia y todos le gritaron “beso, beso”.

Cerraron con un buen cover al himno de Linkin Park, “Points of Authority”, lo cual lleva a la interesante reflexión de como aquellas bandas de hace 20 años que dejaron raíces en los jóvenes, empiezan a brillar como influencias. Gran debut, Afterglow es una banda prometedora en la escena.

“¿Aquí en México hacen crowd surfing?”: así fue el show de Polyphia en la Carpa Velódromo

“El viejo sabroooosoooo, el viejo sabroooosooo”, coreaban muchos a la Chucky Lozano antes de la llegada de Polyphia a la Carpa; no tengo pruebas pero tampoco dudas de que se referían al guitarrista líder, Tim Henson.

Seis años después de su última actuación en suelo capitalino, los texanos volvieron, sonrientes, maravillados por la respuesta de fans que los recibieron entre gritos y una pasarela de celulares grabando. Henson subió a una pequeña tarima y de inmediato, se dio inicio a “Loud”, junto a Scott en la otra guitarra y ambos Clay (Aeschliman y Gober) le seguían en la parte rítmica.

“¡Hola, cabrones! Este es mi amigo Clay y tiene una pregunta… ¿Aquí en México hacen crowd surfing o no?”, preguntó Scott antes del “40oz” donde por supuesto, fue recibido entre las manos de sus seguidores. Sin duda esa fue la clave del éxito del espectáculo de Polyphia: lograr conectar con su público, animarles, bromear, ser uno mismo durante más de una hora pues más allá de la técnica de ensueño, la comunicación es vital para lograr algo como banda. Ellos lo entienden perfecto.

“Es muy hermoso estar de vuelta, han pasado varios años“, dijo más adelante el guitarrista. El público, por su parte, le respondió con el obsequio de un muñeco del Dr. Simi ante aclamación general. Ahora sí, ya tuvieron todo el ritual mexicano.

Puro hitazo para el cierre: “ABC”, “Euphoria” y un encore de tres temas donde el final con “G.O.A.T.” fue una auténtica belleza. Imagínate haberte perdido recital tan perfecto por ver la Liga MX.

Setlist de Polyphia en la Carpa Velódromo

1. Loud
2. Chimera
3. Goose
4. 40oz
5. Icronic
6. Champagne
7. The Worst
8. All Falls Apart
9. Crush/Culture Shock
10. So Strange
11. ABC
12. Euphoria
13. Genesis
14. Playing God
15. G.O.A.T.