Silver Surfer Black: Nacimiento, muerte y redención de una leyenda

“Si abandonamos la batalla porque parece imposible, ¿entonces dónde está el valor?” SSB

Silver Surfer es de los pocos personajes que ha logrado mantener intacta su esencia a pesar de los años, las modas y hasta los argumentistas progre que desde principios del siglo XXI se adueñaron no solo de Marvel sino de la industria del cómic en general. Desde su primera aparición en Fantastic Four vol.1 #48 (1966), Jack Kirby y Stan Lee dejaron claro que no se trataba de un personaje más y eso quedó demostrado en todas sus apariciones previas a su título en solitario en los lápices de John Buscema en 1969, que hoy está considerado de culto.

En síntesis, Silver Surfer es el filósofo existencialista de Marvel, con estándares tan altos, resultaba poco creíble que se le pudiera dar continuidad a semejante legado sin arruinarlo. Sobre todo en una época donde los “reinicios” con cambio de origen, raza y hasta de género son la mejor propuesta de una industria que se niega a crear cosas nuevas para evolucionar.

Para la nueva generación de lectores de Marvel la etapa de Mike Allred y Dan Slott al frente de SS ha sido una de las mejores de la historia reciente del personaje. Un trayecto de tintes “pulp” con ecos psicodélicos por lo que cuando supo que Donny Cates llevaría a cabo una miniserie con el personaje, surgieron varias dudas. ¿Estaría a la altura de los demás escritores?, ¿sabría respetar la esencia de un personaje tan complejo?

Con Silver Surfer Black se disiparon todas, incluso el forzado e insulso dios de los klintar: Knull parece significativo e importante en una historia de cinco números que nos hace sentir en cada página como si estuviéramos trepados en una tabla de surf rumbo a las estrellas con una buena dosis de LSD.

Un homenaje a Stan Lee…

Esta miniserie de 5 números hizo una aportación muy personal por parte de Donny Cates, cuando comenzó a escribirla, se enteró de que Stan Lee había fallecido. Saber que Silver Surfer era el personaje favorito de Stan Lee, hizo que Cates le rindiera en ella un homenaje póstumo.

La historia comienza como consecuencia de los acontecimientos narrados en el primer número del 5o volumen de Guardianes de la galaxia. Escrito también por Cates, cuenta como la orden negra en su afán por robar el cadáver de Thanos genera un agujero negro que absorbe a gran cantidad de héroes, entre ellos a Silver Surfer. Perdido en el tiempo y el espacio deberá recorrer millones de años y de galaxias hasta encontrar un planeta que no es precisamente el lugar tranquilo que buscaba.

Una miniserie de Silver Surfer que nos lleva a un recorrido filosófico

Esta miniserie podría haber sido una batalla ordinaria de Silver Surfer contra Knull, pero estamos frente un camino, un recorrido filosófico, reflexivo y lleno de fantasía. Hay redención en estas páginas para Silver Surfer, sus remordimientos, nacidos de su incontable entrega de mundos a Galactus supone el inicio de su camino. Será el propio Galan (nombre original de Galactus) el que le dé la llave para encontrar la paz en su interior. Donny Cates consigue con su argumento engrandecer el mito fundacional del personaje. Los cinco números que conforman esta miniserie son una muestra de la eterna lucha entre la luz y la oscuridad. Reflexivamente contemplamos en primera persona nacimiento, muerte y redención de una leyenda del noveno arte.

Por supuesto la obra está salpicada de referencias y guiños a Parábola de Stan Lee y Jean “Moebius” Giraurd. Ya había sido publicada en pasta blanda y ahora complementa esta bellísima edición de pasta dura. Todo un clásico contemporáneo que no debe faltar en cualquier comicteca que se respete sean o no seguidores de Silver Surfer, puede leerse con música de Pink Floyd, Jefferson Airplane incluso de Joe Satriani.